AFORISMOS CAPITALES: SOBRE LA IRA
Sentencias cortas con pretensión de alcances largos
Bendita sea la ira
La pálida ira silenciosa
que tiembla igual que un arco demasiado tenso
o la ira colérica
que grita con voz resonante
y la oscura ira abismal
que retumba en la campana de alarma de la tormenta
Bendita sea la ira
que con su guadaña de luz
despierta al indiferente
y con su fuego
oscurece la sonrisa del tramposo
la ira que desenmascara
al ostentosamente dadivoso
y al que acepta con avidez
Maldita sea la ira
que habla con la lengua del odio
sólo para extender más odio
Huye de esta ira engañosa
como si de una serpiente venenosa huyeras
Pero no huyas de la ira
que embriagada de furor
tropieza con sus palabras
préstale
la oreja redonda de la paciencia
Y tu propia ira contenida
que se retuerce como un sacacorchos
en tu corazón
o susurra como una abeja
encerrada en tu mano:
libérala
reparte contigo mismo
las frutas de tu ira
Bendita sea la ira
que con su discurso brillante
agudiza y se yergue
haciendo huir a la maldad
al igual que las sombras
huyen de la luz-
Bendita sea la ira que lucha
por más vida en la vida
más amor en el amor
más justicia en la justicia.
María Wine (1912-2003)
AFORISMOS SOBRE LA IRA
· La ira, desde dentro, fuerza y explosión incandescente, pero visto desde fuera es absoluta debilidad.
·Si todo el mundo se dejara llevar por la ira no habría mundo.
· No hay nada más peligroso que la ira del hombre tranquilo.
· La ira, en ocasiones, es la única manera de resistir.
· Un método para luchar contra la ira es el contar. Hasta diez o hasta cien, según el caso.
· La ira es el arma más terrible de los pueblos oprimidos.
· La ira tapa tu mente y muestra tu corazón.
· La ira es una locura breve y si se hace persistente se convierte en odio.
· Lo obtenido con ira dura poco, pero lo dado con amor siempre queda.
· El eco de tu ira es la vergüenza que te acompañará después.
· La indignación es la ira contra la injusticia.
· La ira de quién no puede es el resentimiento.
· El vandalismo es la ira del tonto.
· Para luchar contra la ira ármate de paciencia pero nunca de resignación.
· En el punto de mira de la ira se ve borroso.
· La ira es la pira de las frustraciones.
· El iracundo es un tipo peligroso, pero es que del indolente abusan.
· Para el pobre casi nada justifica su ira en cambio, el soberbio nunca deja de sufrirla porque se cree con derecho a todo.
· La ira es un pecado, pero en ocasiones también, la única solución.
· La ira es breve pero el resentimiento dura toda la vida.
· Los rescoldos de la ira si se agitan dan hostilidad que es un fuego que nunca se apaga.
· El premio por controlar un momento de ira es el escapar a cien de tristeza.
· El valiente muestra ira ante los fuertes y el cobarde solo ante los débiles.
· Las más de las veces la ira que sentimos nos causa más daño que la ofensa que la origina.
· El débil se deja arrastrar por la ira y el inteligente la deja pasar.
· La ira se ceba en los inocentes, que se lo pregunten a Abel.
· No podemos evitar las ofensas, pero sí que podemos evitar que lo que hagan o digan los demás nos ofenda.
· La ira crece con los caprichos concedidos.
· Pon la riqueza a la vista de tus hijos pero no de sus manos y así les alejarás de la complaciencia y de la ira que siempre la acompaña.
· El mal dormir y el alcohol son el viento que traerá la ira.
· Lo que provoca la ira no es el hecho en sí si no la interpretación que hacemos y como en la vida todo es interpretable toda ira es se puede evitar.
· La ira sirve para luchar contra las injusticias, otra cuestión es si esas injusticias son de verdad o de mentira.
· La ira que persiste en el tiempo enfría el alma y enturbia la mirada.
· La peor ira es aquella que después de sufrirla no te hace sentir vergüenza ni arrepentimiento.
· La ira es pasajera, pero las palabras dichas con ira son puñales que hieren para siempre.
· Con la ira no se puede corregir a nadie ni nada; hay que estar sosegado, pero estando tranquilo a quien primero corregirás será a ti mismo.
· Tan mala es la ira como la mansedumbre, pero mejor manso que loco.
· La ira llega primero al rostro, luego a los labios, después al corazón y finalmente los actos.
Buenas reflexiones sobre la ira. Algunas tan ciertas que he ido identificando a personas conforme lo leía.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Un abrazo
Muchas gracias por tu lectura y generoso comentario. Un abrazo.
EliminarMuy acertadas las distintas interpretaciones. Peligrosa la ira del hombre tranquilo. Un saludo, maestro.
ResponderEliminarMuchas gracias. Coincido contigo cuando al hombre tranquilo lo enervan hasta el punto de perder el control, al final, el malo de la historia será él, pero en verdad no.
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