EL EGO ES TU ENEMIGO

 

EL ENEMIGO ES TU EGO

 

Este libro del autor Ryan Holiday ya escribió con anterioridad otro  libro que fue  un éxito de ventas y que  comentamos en su día   en el blog “Diario para  estoicos” He de decir que éste que ahora comentamos  no me ha gustado tanto. Siempre se aprenden cosas, por supuesto, pero buena parte de lo que he aprendido ha sido de manera indirecta, consultado otras fuentes a partir de algunas cuestiones desarrolladas en el libro, lo cual no está mal, pero evidentemente no es el objetivo fundamental que uno busca cuando bucea en un libro.

El libro está plagado de consejos para evitar que nuestro ego nos domine y nos lleve al fracaso en nuestras empresas, actividades, amistades, relaciones, etc. El ego hay que controlarlo y que nos induzca  a creernos mejor de lo que somos ni a pensar que debemos merecer elogios. Y eso está bien, pero expone muchos ejemplos que suenan muy alejados y descontextualizados para un lector español o del resto de Europa porque utiliza  casos de nombres de EEUU algunos recientes, pero otros muchos ya  lejanos en el tiempo que no ayudan a seguir y  meterse en la lectura. El principal concepto de libro ya está expuesto unas líneas arribas, pero para lo cual el autor lo desarrolla con 234 páginas y por eso se hace un tanto aburrido.

No obstante hay algunas perlas. Una de ellas es la que nos permite hablar del ego.








Página 22

“Este libro no es un libro sobre el ego en sentido freudiano. A Freud le gustaba explicar el ego a través de una analogía: nuestro ego era el jinete a caballo, con nuestros impulsos inconscientes representando al animal, mientras que el ego trata de dirigirlos. Los psicólogos modernos, por su parte, usan la palabra “egoísta” para referirse a alguien que vive peligrosamente centrado en sí mismo y a quien los demás le son indiferentes. Todo  esto es cierto, pero no es muy útil fuera del entorno clínico”

 

Esto no lo dice el autor en el libro, pero lo añado yo de mi cosecha para que quede más claro: Freud decía que el yo es la parte consciente que está entre el “superyó” y el “ello” el superyó sería el ser ideal con las normas y la moralidad escrupulosamente respetadas y el “Ellos” esa parte irrefrenable abandonada a los impulsos y deseos. Por tanto nuestro yo es el que lidia entre la parte racional, lógica, respetuosa con los demás y la otra parte que se abandona al placer y a los deseos sin importar las consecuencias.

Platón desarrolló  una alegoría del auriga, aplicada al conocimiento que a mí me es muy útil para aplicarla al ego y su función.  Platón con esta alegoría pretende explicar las partes del alma. Hay un carruaje con un auriga  tirado por dos caballos. El alma es lo que sostiene al auriga y el carruaje y es alado. El caballo negro representa las pasiones y lo malo y lo feo. El caballo blanco representa por el contrario, las virtudes y las bosas buenas y bellas. El auriga deberá conducir este carruaje controlado el brío de los dos caballos para que el carruaje no vuelque. En esta alegoría  si el auriga podía controlar a los caballos  las alas lo empujarían   hacia arriba llegando  a buen término al mundo de las ideas pero  si no   caerían irremediablemente al mundo terrenal pobre copia e imperfecta del mundo ideal.

Yo, para entender a mi manera  el ego, hago una fusión entre Freud y Platón (por eso los comento). Para mí el ego sería un caballo con mucho brío y  fuerza. Algo  muy interesante que nos puede dar la energía para superar los retos y dificultades y llegar a donde queremos en cada momento de la vida,  pero cuidado. Debemos ser nosotros, el jinete quienes domemos al ego para que vaya al ritmo que marquemos y por la senda elegida. Si lo conseguimos será fantástico, pero debemos evitar que sea el ego un caballo desbocado que nos controle a nosotros y nos haga caer.




Una idea interesante es aplicar el aureum mediocritas (el punto medio de las cosas es donde está el valor) para el ego. Ni demasiado inflado ni demasiado apagado. Lo que en psicología se denomina ni ego negativo (inflado), donde se hace prevalecer a uno siempre por encima de los demás y con más valía  ni ego positivo (apagado) donde se prima a los demás siempre en detrimento de uno.

Una idea muy interesante en el libro es una frase de Goethe:

 “El gran error es verse a uno mismo como más de lo que es y valorarse como menos de lo que vale de verdad” Muy cierto sobre todo aplicado a los jugadores de pádel.

Cuenta la leyenda, para que perdamos toda vanidad y todo ego que el gran Alejandro Magno el conquistador (y alumno de Aristóteles) se acerco al sabio y pobre Diógenes que estaba tomando tranquilamente el sol y le dijo: <<Qué necesitas>>, a lo cual el sabio respondió: <<Que te apartes que me estás tapando el sol>>.

Con respecto al daño que nos puedan causar los demás o algunos hechos recordemos una interesante cita de Marco Aurelio: <<Puede arruinar tu vida solo si arruina tu carácter>>.

<<Cualquier tonto puede aprender de la experiencia, el truco está en aprender de las experiencias de los demás>> cita de Bismark y para terminar una frase de Plutarco: <<No obtenemos tanto conocimiento de las cosas a través de las palabras como palabras a través de la experiencia que tenemos de las cosas>>.

En esta página tenemos otra definición muy interesante y explicativa:

https://www.significados.com/ego/


 Para una mayor aproximación al concepto del ego.




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