EL MOTEL DEL VOYEUR

El motel del voyeur

El libro lo compré en diciembre de 2018 junto a otros dos  más. De una tacada, y el primero en ser leído  fue éste que les voy a comentar. Los otros dos, ensayos, uno sobre la teoría de la evolución y el otro sobre el ser humano, así como suena, en general,  van marchando, pero  su lectura además de lenta se entrecorta demasiado  por aquella ley casi inexorable  de que   una empresa si es fatigosa por placentera que  resulte se convierte  en diana favorita a la que van dirigida todas la flechas habidas y por haber con forma muy puntiaguda de imprevistos y cansancios  que la van demorando hasta que nos ponemos serios, muy serios para  acabarla, apesadumbrados por dejarla inconclusa u olvidadizos y resignados  para no reconocer nuestro fracaso con la palabra desidia asomando entre nuestro sentimiento de  culpa.

A lo que iba. El motel del voyeur es una pequeña novela, en formato de reportaje, de 224 páginas en la edición de bolsillo escrita por el periodista y escritor Gay Talese (1931, EEUU). El origen de esta novela fue una carta que recibió el periodista en 1980 en el que un hombre, Gerald Foos, le explicaba que había regentado un motel en Denver (Colorado, EEUU) durante mucho tiempo, varias décadas, y que lo había utilizado para espiar a sus clientes cuando mantenían relaciones sexuales. Vamos, un voyeur profesional. Al que había dedicado su negocio y muchas, muchas horas, de su vida. Se justificaba diciendo que había mantenido un registro de todas las prácticas sexuales observadas y que dicho registro podría constituir un estudio sociológico del país  y su evolución. Como por ejemplo cuando se constataba el incremento de las relaciones sexuales interraciales, prueba de una superación del racisimo  o de la mayor relajación moral con una mayor  permisividad sexual que se traducía en sexo grupal como  tríos,  orgías y relaciones entre personas de un mismo sexo.  Periodista y confidente tras superar sus reservas iniciales deciden colaborar y es entonces cuanto Gerald Foos con una excelente caligrafía le muestra sus diarios donde quedaban recogidas todas sus observaciones. Sólo en una  ocasión estuvo a punto de ser descubierto y otra más cuando el propio periodista le acompaño en una de sus observaciones y su corbata se introdujo por la rendija de los falsos conductos de ventilación. Cuando en la habitaciones que espiaba había perros éstos si detectaban su presencia. Gerald Fooos se casó dos veces y las dos mujeres no sólo fueron conocedoras del voyerismo en grado sumo de su esposo si no que además le ayudaban a hacerlo. En una ocasión, tal y como relata el propio Gerald Foos, observó a una pareja que alquiló una de sus habitaciones. Una pareja de las que el calificaba como de casquete rápido (amantes furtivos, en este caso un médico y una enfermera) y que tras abandonar la habitación Gerald siguió a la mujer hasta su casa. Ella entró y besó sonriente a su marido. Ese hecho a Gerald, no sabemos porqué le llamó bastante  la atención. Como pueden imaginar el libro es  una larga ( y por la repetición, aburrida sucesión de avatares transcurridos  en las habitaciones de su motel donde él pasaba muchas horas espiando para poder de vez en cuando dar rienda a su extraña pasión oculta que hasta incluso al parecer le llevó a no denunciar un caso de asesinato, un estrangulamiento de una mujer en una de sus habitaciones por miedo a que se descubriera su actividad.

La polémica

El libro se lanzó en verano de  2016, pero un poco antes, en una entrevista del propio autor al diario Whashington Post éste reconoció que su única fuente, Gerald Food, le pareció una persona deshonesta y de poca credibilidad. Lógicamente  muy poco después se retractó de esas declaraciones, pero la duda  ya estaba sembrada. El propio Steven Spielberg compró los derechos de autor para una posible película.

FICHA TÉCNICA:

TÍTULO: EL MOTEL DEL VOYEUR

AUTOR: GAY TALESE

TRADUCCIÓN: DAMIÁ ALOU

PÁGINAS: 225

AÑO DE LA PUBLICACIÓN: 2017

ISBN: 9 788466342100

PENGUIN RANDOM HOUSE GRUPO EDITORIAL

COLECCIÓN DE BOLSILLO

GÉNERO: NARRATIVA DE FICCIÓN.