Maquinitas deseantes

Maquinitas deseantes En entradas anteriores hemos comentado la relación que existe entre el control del deseo, el impulso y el éxito. Del triunfo de la libertad sobre el imperio del impulso. Platón dijo que la educación consistía en hacer tener buenos deseos, lo que no dijo era cómo. Los griegos llamaban a la proliferación de los deseos pleonexia, y lo veían como algo malo. Si a eso le añadimos impaciencia, aparece lo que el castellano llama "ansia" mala cosa aunar ambas. Desgraciadamente en nuestra sociedad actual, el modelo de desarrollo se basa en buena medida en explotar este muy débil punto de los humanos. Los deseos sin reflexión saltan los portillos del ánima. Desde siempre ha habido tiranías que supuestamente han intentado engendrar "un hombre nuevo" , en el mismo siglo pasado, la nazi o la comunista. A pesar del gran poder coactivo que ejercieron, traducido en millones de muertes, fracasaron. Fue justamente esa coacción la que inmunizó a los ...