#HISTORIASDEPADRES : UN RELATO PARA EL CONCURSO DE ZENDA

HAZME UN BIZUM Por el 19 de marzo me acuerdo de mi padre. Algo absolutamente lógico. No tiene nada de extraordinario acordarse del padre en el día del padre. Lo que quiero decir es que en el día del padre no pienso en mí como el padre que también soy. Solo rememoro la figura paterna como hijo que soy aunque desconozco si mi caso es particular o algo más generalizado, que se piensa pero no se exterioriza. El caso es que la referencia de ser hijo la tengo mucho más grabada que la de padre y no por falta de haber derrochado esfuerzo, tiempo y horas de preocupación y vigilia, sin pegar ojo, cuidando de los hijos porque el amor de un padre (progenitor A o B en algunos formularios) hacia un hijo nunca se agota, ni se derrocha, ni se malgasta, aunque, eso sí, pueda quedar en balde. Ser padre ( o progenitor B o A) en la infancia, aunque duro, es agradable, pero a medida que los ...