UNA REFLEXIÓN ACERCA DE LA AMISTAD: DESDE ARISTÓTELES HASTA NUESTROS DÍAS
Acerca de la amistad: de la profundidad de Aristóteles a la superficialidad del facebook De la amistad Aristóteles lo dejó explicado todo. La diseccionó con precisión de relojero pero aquello se olvidó y hoy, 2500 años después, las redes sociales y el facebook han hecho de la amistad un pobre y desnaturalizado sucedáneo. Los seres humanos al tropezarse unos con otros pueden conectarse de diferentes maneras. Y uno de los ligazones más poderosos que existen es, junto a la necesidad, la amistad. Si escribiéramos la palabra amistad en la esquina de un papel y lo doblásemos por la diagonal justo en el extremo opuesto se hallaría el odio: una perfecta amistad en sentido inverso que despierta la misma si no más energía que la benéfica amistad. En el reverso de la amistad, por la otra cara del papel, estaría el amor y en el del odio la envidia y muy cerca de esta la soberbia. En esa línea marcada por el doblez hecho en el papel, poco antes de llegar al odio nos to